jueves, 26 de marzo de 2015

PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA





INTRODUCCIÓN

Actualmente existe en el mundo una transición epidemiológica caracterizada por el aumento de las enfermedades no transmisibles. Muchos países en vías de desarrollo afrontan una doble carga de morbilidad debido a que continúan lidiando con los problemas de las enfermedades infecciosas y la desnutrición, y a la vez presentan un aumento de enfermedades no transmisibles como la obesidad y el sobrepeso.
En los países de ingresos bajos y medianos, los niños son más propensos a recibir una nutrición prenatal, del lactante y del niño pequeño insuficiente. Al mismo tiempo, están expuestos a alimentos hipercalóricos ricos en grasa, azúcar y sal y pobres en micronutrientes, que suelen ser poco costosos. Estos hábitos alimentarios, juntamente con una escasa actividad física, tienen como resultado un crecimiento brusco de la obesidad infantil, al tiempo que los problemas de la desnutrición continúan sin resolver.
La obesidad infantil se asocia con una mayor probabilidad de obesidad, muerte prematura y discapacidad en la edad adulta. Pero además de estos mayores riesgos futuros, los niños obesos sufren dificultad respiratoria, mayor riesgo de fracturas e hipertensión, y presentan marcadores tempranos de enfermedad cardiovascular, resistencia a la insulina y efectos psicológicos.
A menudo los cambios en los hábitos de alimentación y actividad física son consecuencia de cambios ambientales y sociales asociados al desarrollo y de la falta de políticas de apoyo en sectores como la salud; agricultura; transporte; planeamiento urbano; medio ambiente; procesamiento, distribución y comercialización de alimentos, y educación.

El sobrepeso y la obesidad, como la mayoría de las enfermedades no transmisibles, pueden prevenirse si se detectan a tiempo; el presente trabajo indaga en la respuesta social organizada hacia la obesidad infantil existente en este momento en México y en Japón, con el fin de identificar …